La Plegaria (parte 1)

¿En realidad funciona la Plegaria?
¿Como debemos hacer para que nos escuche el Creador?

Estamos seguros de que alguna vez te has hecho estas y muchas preguntas más acerca de la plegaria u oración.

Aquí hablaremos de este gran Regalo que el Creador Bendito nos a otorgado a cada uno de nosotros, y estamos seguros de que esto te ayudará a utilizar de manera efectiva este inmenso regalo Divino!

Existe un gran error respecto a la interpretación que se le da a la plegaria u oración, la primera connotación de la palabra plegaria u oración tienden a relacionarla con el acto de "pedir cosas" como: Salud, riqueza, éxito, poder, etc...

Se cree que es como un recurso casi mágico al cual apelan los primitivos y los ignorantes en un esfuerzo por sobreponerse a su desproteccion frente a las dominantes fuerzas de la naturaleza.
Para otras personas la plegaria ritual religiosa es como una ceremonia formal que carece de sentido, en una lengua que no comprenden y que no tiene relación alguna con sus vidas y sus problemas personales.

Pero nos hemos olvidado que incluso hasta en la generación de nuestros bisabuelos mucha gente encontraba de lo más natural el hablar directamente y de manera espontánea con su Creador, en sus propias palabras, tratando sus necesidades y abriendo sus corazones. Pero, para la mayoría de la gente de hoy en día, esta idea de hablar directamente con su Creador y en su propio lenguaje es considerado algo místico y distorsionado e irreal, pensando que Di'os se encuentra muy lejos o simplemente que es imposible que les escuche.
¿Cómo es posible qué el Creador se interesa en nuestros pequeños e insignificantes problemas y necesidades? Y en todo caso, si el Creador conoce todo incluyendo nuestros pensamientos, para qué entonces es necesario hablarle?
¿Y cómo nos contesta cuando hablamos con Él?

La verdad es la siguiente:
"Pero no esta en los Cielos... la palabra se encuentra muy cerca de ti, en tu boca y en tu corazón para hacerlo"
(Deuteronomio 30, 12-14)

La verdadera plegaria no significa dirigirse al Creador "allí afuera" puede ser tan íntima y directa cómo hablarle al propio corazón.
Si analizamos el contenido de los Salmos y de las plegarias de un sidur, veremos que aunque el lugar preeminente lo ocupan las plegarias de súplica y petición, en especial para el logro de la iluminación espiritual, ellas constituyen sólo un aspecto.
Pero también existen muchas descripciones de los trabajos y actividades del Creador en la naturaleza y en historia, en forma de alabanzas, gratitud y reconocimientos, pues cuándo admitimos la presencia activa del Creador en nuestras vidas y en este mundo, entonces es una de las formas más importantes en las que experimentaremos nuestra conexión con el Creador Bendito.

Además de súplicas y de afirmaciones, los Salmos le ponen voz a los sentimientos y a los pensamientos más íntimos del buscador espiritual, como la introspección, autocrítica, la alegría respecto de lo bueno en uno mismo y la tristeza por lo malo, la lucha con la mala inclinación, miedos, dudas, preguntas, la alegría de la devoción, la reverencia, el amor, el temor, el anhelo al Creador, etc...

Otra importante faceta de la plegaria es la afirmación, constantemente nos recordamos respecto a nuestra fe, nuestra esperanza y la confianza en el Creador, nos exhortamos a no tener miedo y no desmoralizarnos ni desesperar y dirigir nuestra mente hacia las cualidades que deseamos cultivar en nuestra vida como son la justicia y la rectitud la bondad y la misericordia...

Lo importante de este 'viaje espiritual' es adentrarse profundamente en uno mismo y así poder unirnos con nuestro Creador.
La Plegaria y la autocomunion llegan a unirse, pues el yo, el alma, deriva del Creador Bendito, el alma es "parte del Di'os de arriba" (Job 31,2)
Por lo tanto, cuanto más descubrimos y revelamos nuestro lado espiritual, más se manifestarán la Presencia Divina en nosotros, comenzando experimentar lo íntimamente unidos al Creador que estamos en nuestra esencia y lo cercano que Él está de nuestros pensamientos, nuestros sentimientos y nuestra conciencia.

Continuaremos...

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