¡No es justo lo que me está pasando!
Seguro que te has preguntado alguna vez: ¿Porque me está pasando esto, si yo no le hice nada a esa persona?
¿Por qué las cosas no me marchan como yo quiero? ¿Porque no puedo salir de estos problemas? y muchas mas situaciones que no comprendes.
Nuestros sabios nos dicen "No hay sufrimientos sin transgresion"
Y la verdad es que nada de lo que nos sucede, tanto lo bueno como lo aparentemente malo, No se lo debemos adjudicar a otras personas o situaciones, no debemos buscar escusas ni culpables!
Pues todo esta dirigido por el Creador.
"A nadie le dañan sin el consentimiento del Creador"
Recuerdan cuando a David HaMelej (el rey David) Vino un hombre de la casa de Saul, llamado Shimi hijo de Guerá, y comenzó a maldecirlo, y arrojandole piedras le decia:
¡Vete hombre sanguinario he impío! Lo amenazaba con duras reprenciones...
Entonces uno de sus siervos del Rey David quiso arrancar su cabeza, pero el Rey David lo detuvo y le dijo "Déjenlo, pues el Eterno le ha dicho que me maldiga, quizá vea el Eterno la lágrima de mi ojo y me devuelva el Eterno bien en cambio de su maldición en este día"
(Samuel 2, 16:5)
Así que hoy debemos recordar que todo está dirigido por Hashem y que nada es casualidad, y cuando pasamos por situaciones difíciles es mejor que hagamos jeshbon Nefesh, (un recuento del alma) o mejor dicho un auto analisis, pidiendo al Eterno que nos muestre que error o falta hemos cometido para poder arrepentirnos y hacer una rectificación.
Muchas veces creemos que somos muy buenos, pero la realidad es otra, "es que no nos conocemos bien"
En los próximos días hablaremos de faltas y transgresiones muy graves, que aparentemente no lo son y estas afectan gravemente nuestras vidas, como por ejemplo:
-"Lashon Hará" (Chisme o Calumnia)
-"Akarat haTov" (El no reconocer el bien que algún día hemos recibido de los demás, en pocas palabras "ser malagradecido")
Pues los sabios dicen que esto están grabe que quien no reconoce y agradece el favor de su prójimo, acaba por desconocer los favores del Creador...
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